Conducción automatizada en la fábrica: BMW Serie 7 G70 e i7 sin conductor

El BMW Serie 7 y el i7 (G70) completan los primeros metros de la vida de su vehículo sin conductor a bordo: bajo las siglas AFW, que significan Automated Driving at the Plant (conducción automatizada en la planta), la berlina de lujo aprendió a conducir sin conductor en la planta de BMW en Dingolfing. Sin embargo, quien piense en conducción autónoma o en piloto automático se equivoca de camino: en un principio, AFW sólo consiste en dominar el trayecto de 170 metros desde la nave de montaje hasta la zona de acabado; más adelante, también será posible recorrer automáticamente el trayecto desde el final de la línea de acabado hasta la zona de expediciones. ¿Aún sigues buscando coches segunda mano en Murcia?

 

Sin embargo, los numerosos sensores y sistemas de asistencia a bordo del nuevo BMW Serie 7 no son necesarios para ello: AFW es un proyecto piloto realizado por el Grupo BMW junto con Seoul Robotics y Embotech, que se basa en sensores y controles externos. Para ello, la ruta de conducción se equipó con sensores que permiten al vehículo reconocer con precisión su propia posición. En combinación con un sistema de reconocimiento del entorno, se puede garantizar que no haya obstáculos en la ruta prevista. El software de planificación de trayectos aportado por Embotech puede acelerar, frenar, dirigir y aparcar en este entorno protegido. «

 

La conducción automatizada en la fábrica es un paso importante hacia la optimización de los procesos y aprovecha las capacidades existentes de los vehículos en esta fase avanzada de la producción. Antes de la conducción automatizada, solo el primer arranque del motor y la finalización de una zona de pruebas inicial tienen lugar bajo supervisión humana, tras lo cual las limusinas de lujo ruedan hasta la siguiente estación como por arte de magia.

 

En la planta de BMW en Dingolfing, sin embargo, los vehículos sin conductor no son una verdadera novedad: las carretillas elevadoras automatizadas y los trenes remolcadores que realizan tareas de transporte y mueven piezas de todo tipo de A a B sin un supervisor humano son una imagen familiar aquí desde hace mucho tiempo.

 

Sascha Andree (Jefe de Proyecto de AFW): «La conducción automatizada en la fábrica básicamente no tiene nada que ver con las funciones de conducción autónoma para el cliente. Nuestro enfoque es distinto. No utilizamos la tecnología de sensores del vehículo, sino que recurrimos a una infraestructura que está fuera del vehículo para el reconocimiento del entorno y la planificación del movimiento del vehículo.»