Prueba del Ford Edge Vignale con motor diésel BiTurbo de 2.0 litros

Sigue siendo el más grande. Pero pronto se unirá al Ford Edge un modelo aún más grande en Europa. Con el Ford Edge, hay un toque de sentimiento americano para el cliente alemán. Pero, ¿hay que hacer sacrificios o puede la versión Vignale estar a la altura de la competencia más cara? Más información en el informe de conducción. En el concesionario Crestanevada de coches ocasión Madrid, encontrarás el coche de tus sueños al mejor precio.

Ni siquiera es tan grande para ser un buque insignia

Con algo menos de 4,80 m de longitud, el SUV ya es uno de los más grandes de su clase en Alemania. En EE.UU., el modelo sigue considerándose «mediano». El coche de pruebas está propulsado por un motor diésel biturbo de 2,0 litros, que con 238 CV y 500 Nm de par no tiene ningún problema con las casi 2,1 toneladas de peso en orden de marcha. Sólo cuando se agota toda la carga útil y la capacidad de remolque de dos toneladas, el motor diésel llega a sus límites. Pero una carga así probablemente sólo ocurre una vez al año cuando se conduce de vacaciones.

Impresión de conducción del Ford Edge 2.0 BiTurbo Diesel

Aparte de eso, el gran SUV consume entre 7,7 y 8,6 l/100 km en conducción diaria. Gracias a los dos turbocompresores, el motor entra rápidamente en acción y la maniobra de adelantamiento se realiza con facilidad, incluso con carga. Aunque el Ford Edge se está haciendo un poco mayor, sigue teniendo a bordo refinamientos técnicos de los que carecen sus competidores. Por ejemplo, la cámara de visión trasera de serie con su boquilla de limpieza integrada. Incluso con mal tiempo, la visibilidad trasera está garantizada. Con el sistema de sonido B&O opcional, por ejemplo, se nota que Ford ha avanzado mucho en este campo. Suena mucho mejor en el Fiesta y el Focus que en el SUV insignia.

Por lo demás, en la primera fila se utilizan asientos con aire acondicionado y calefacción. Éstos, a su vez, tienen una superficie de asiento larga, de modo que las personas especialmente altas pueden sentarse aquí muy cómodamente. Y detrás de ellos, también hay espacio para personas de estatura normal. Porque el aprovechamiento del espacio está a un buen nivel. Sólo hay que acostumbrarse al tamaño americano, porque especialmente en ciudad el Ford Edge no es tan maniobrable como la competencia alemana. Más información en el reportaje de conducción en vídeo.